Elradardelsur.ar 13/05/2024
Variedad gastronómica, literatura, disciplinas deportivas, arte, formación, tendencias actuales, bailes y sonidos ancestrales: multiplicidad de factores que hicieron del festival japonés local uno de los más convocantes de la región.
El jefe comunal -Andrés Watson- dialogó con miembros en la organización y concurrentes en una nueva edición de la celebración organizada por la asociación nipona en Florencio Varela en su predio de Av. Eva Perón Nº7215.
En este contexto, el Alcalde destacó “la hermandad entre ambas comunidades que siempre fue valiosa para nuestro partido”. “Estos vínculos fraternos fueron los que conformaron el desarrollo del distrito”, remarcó.
Por otra parte, el Intendente instó a “continuar el trabajo colaborativo de manera permanente” con la entidad.
En tanto, el ministro consejero -Kenji Shimada- habló sobre “el entusiasmo de la gente en un evento familiar consolidado en esta ciudad” cuyo origen fue el de “estrechar lazos con la sociedad”.
El presidente del establecimiento anfitrión -Fernando Uehara- indicó: “Apostamos nuevamente a la esfera educativa para colaborar con lo recaudado en la jornada”. Las instituciones beneficiadas con los aportes fueron el Jardín Municipal N°13 de San Rudecindo y la Escuela Primaria Nº47 de Curva de Chávez.
Caracterizada con vestimenta oriental, María Victoria acudió desde Berazategui junto a su hija. “Me pareció un encuentro muy abarcativo de toda esta cultura. Conseguimos muchos productos típicos y probamos el curry”, reveló la mujer.
Gabriela presentó su emprendimiento culinario “Momiji” con su especialidad: el tradicional postre “mochi” a base de harina de arroz, aunque reversionado con rellenos de diversos sabores. A pesar de la lluvia, la vendedora resaltó “una fecha multitudinaria”. “El día no ayudó, pero el público asistió igual”, aseguró.
Al salir del puesto con delicias pasteleras, Sebastián sentenció: “Jamás lo había comido en su formato helado. Me encantó”. El hombre oriundo de Adrogué confesó que llegó a la propuesta atraído por las exquisiteces de la cocina como también “por los shows de tambores y la oportunidad de conocer personas, encontrarme con conocidos de otros lados”.
Mientras adivinaba su suerte con las clásicas galletas de la fortuna, Rocío -de La Capilla- aseveró: “Cada vez que pudimos, vinimos. Más que nada a degustar la comida”.
Con el patito viral en Tik Tok como adorno de su peinado, Maribel -de Villa del Plata- contó: “Desde chica me interesó lo asiático. En 2015, me enteré del Varela Matsuri por un amigo y me enamoré. A partir ese año, no me lo perdí nunca”.