ElRadardelsur.tv : 3/11/2014
La joven estadounidense, cumplió el sábado con su promesa de suicidarse, se despidió en un mensaje que tuvo gran repercusión en las redes sociales: "Hoy es el día que elegí para morir con dignidad".
Su esposo Dan publicó un obituario Brittany Lauren Maynard nació en 1984 y forjó una breve pero sólida vida de 29 años de generosidad, compasión, educación, viajes y humor.
El año pasado a Brittany le diagnosticaron un cáncer cerebral. Se le dio un diagnóstico terminal irreversible y un pronóstico de mucho dolor,
Brittany optó por vivir cada día plenamente, viajar y mantenerse físicamente activa y ocupada todo el tiempo que pudiera.
En el texto, se intercala una frase de Theodore Roosevelt presentada como una fórmula para vivir, enfermo o sano: Haz lo que puedas, con lo que tengas, dónde te encuentres.
La historia de Maynard  tuvo y tienen un impacto inusual entodo el munco , donde se ha reavivado el debate sobre la eutanasia, con voces que se alzaron para respaldarla y otras -incluso de otros pacientes terminales- para cuestionarla.
Ella y su esposo se mudaron de California a Oregón, uno de los cinco estados en EE.UU. en los que el suicidio asistido por doctores está permitido.
Una vez que estableció allí su residencia y probó que le quedaban menos de seis meses de vida, obtuvo las medicinas para morir.
En 1997 Oregón se convirtió en el primer estado de EE.UU. en legalizar el "derecho a morir dignamente".
Los pacientes terminales en pleno uso de razón pueden solicitar la muerte asistida a un doctor.
El paciente debe tragar la píldora sin ayuda. Es ilegal que el doctor la administre.
Cumplió sus sueños..
La semana pasada, Maynard finalmente cumplió con el deseo de visitar el Gran Cañón.
"Tuve la posibilidad de disfrutar de mi tiempo con las dos cosas que más amo: mi familia y la naturaleza", escribió en su blog.
La experiencia, sin embargo, no fue totalmente plena, porque como dijo, "es imposible olvidar mi cáncer".
 El sábado, en su casa de Oregon, la chica de 29 años que se convirtió en un emblema de la muerte digna, tomó dos pastillas y terminó con su vida.Â
La información fue confirmada anoche por el vocero de la asociación Compassion and Choices (compasión y elecciones), que lucha por el derecho a la eutanasia y acompañó a Brittany en todo este proceso desde que hizo pública su voluntad de un derecho asistido.
En un mensaje ampliamente difundido en las redes sociales, Brittany se despidió antes de morir. "Adiós a todos mis queridos amigos y a mi familia que amo. Hoy es el día que elegí para morir con dignidad, dada la enfermedad en fase terminal, este terrible cáncer en el cerebro que me ha encarcelado... pero me habría encarcelado mucho más", escribió.
La nota de despedida realizada por su esposo señala en otro pasaje: Ella fue una viajera consumada y aventurera que pasó muchos meses viviendo sola y enseñando en orfanatos en Katmandú, Nepal. Esa sola experiencia cambió para siempre su vida y su perspectiva sobre la infancia, la felicidad, los privilegios y el éxito.
También cuenta el obituario que ella amaba a sus dos perros como si fueran su familia, un pequeño Beagle y Gran Danés.
Y sobre la decisión de morir de la mujer, su esposo dice: Brittany optó por hacer la elección bien pensada e informada de morir con dignidad frente a una enfermedad tan terrible, dolorosa e incurable.
Y finaliza con una cita dicha por la misma Brittany: La gente que hace una pausa para apreciar la vida y dar gracias es la que es más feliz. Si cambiamos nuestros pensamientos, cambiamos nuestro mundo. Amor y paz a todos ustedes".
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