Elradardelsur.tv – 07/03/2018
El 8 de marzo recordamos el trágico suceso de 1908 en el que mueren calcinadas 146 mujeres trabajadoras en la fábrica Cotton de Nueva York, que reclamaban por sus salarios y mejores condiciones laborales
Las mujeres han impulsado muchos de los grandes cambios sociales y es innegable su contribución al arte, la ciencia, la cultura, la política, la educación y la medicina, entre otros aportes, que generalmente se obvian, y se esconden tras el velo de la negación y la censura. Esta invisibilidad y las distintas formas de discriminación a las que nos enfrentamos se enraízan en una construcción social histórica que está derrumbándose gracias al aporte de las nuevas tecnologías (redes sociales, etc.).
A los poderosos de este sistema económico y social inhumano le sobran la gente, y muy especialmente le sobran los jóvenes, las mujeres, los adultos mayores y los inmigrantes.
Es un sistema que usa la violencia, la discriminación y la desigualdad para perpetuarse. Desde la óptica de este sistema, jamás encontraremos una solución.
Este momento histórico, donde parece imponerse la violencia, la amenaza, el atropello, la arbitrariedad y la sinrazón, exige un cambio de actitud en la sociedad, en la cultura, en la educación y en las relaciones interpersonales, para converger en la diversidad, y construir una sociedad que ubique al ser humano como el valor central que propicie la igualdad de derechos y oportunidades.
En nuestro país, y a lo largo de la historia, muchas mujeres se destacaron por sus luchas y sus obras. Indiscutiblemente la figura de Eva Perón, que logró poner en discusión el lugar de la mujer como sujeto de derecho. Esto nos impulsa a reclamar por lo que es nuestro y exigir con todas nuestras fuerzas ¡NI UNA MENOS!
Este 8 de marzo nos empoderamos de nuestra historia, de nuestro presente y luchamos por un futuro donde no nos maten por el solo hecho de ser mujer, viajemos sin preocuparnos en un colectivo, en un tren, en un subte, donde elijamos que vestir sin ser cosificadas ni acosadas, donde se termine la brecha salarial entre mujeres y hombres por igual tarea, donde podamos discutir qué hacer con nuestros cuerpos, y el trabajo en el hogar no sea solo cosa de mujeres.
● -Adherimos al Paro Internacional de Mujeres
● -Derecho al debate sobre el aborto legal, seguro y gratuito.
● -Erradicar la violencia machista.
● -Defender la igualdad laboral real.
● -visibilizar y combatir los diferentes tipos de acoso y abuso.
● -Demostrar que, si nosotras paramos, se para el mundo.
● -Basta de la cultura patriarcal
● -Exigimos más y concretas políticas nacionales contra la violencia de género.
Libertad a las detenidas y presas políticas
Hoy nos impulsa un reto inigualable, que es la de mirar el pasado desde nuestro presente y transformar el futuro por una sociedad igualmente justa para todas y todos.
Sin igualdad de género es imposible soñar con igualdad social.