Elradardelsur.tv – 04/08/2020
Con motivo de celebrarse a nivel mundial la semana de la lactancia materna, el Municipio, a través del área de Medicina Complementaria, dependiente de la secretaría de Salud, brinda a la población varelense, recomendaciones para mantener una alimentación saludable durante las etapas del embarazo y el amamantamiento.
La adecuada nutrición de la mujer durante el embarazo es de vital importancia tanto para ella misma como para el bebé en gestación. Asimismo, según el ministerio de Salud de la Nación, “una correcta alimentación contribuirá a disminuir el riesgo de bajo peso al nacer, prematurez, inadecuaciones nutricionales de la madre y el feto, etc”.
“Durante este período es fundamental comer alimentos sanos y llevar adelante una dieta equilibrada. El aumento de peso es aconsejable que sea acorde al mismo que cada madre tenga a la hora de haber quedado embarazada, porque una ganancia en demasía puede ser peligroso, tanto para ésta como para el desarrollo del bebé. En la embarazada puede causar hipertensión, diabetes gestacional y riesgo de contraer obesidad, incluso después de haber tenido a la niña o niño”, remarcó Carla Mora, especialista en nutrición, perteneciente a Medicina Complementaria.
¿Cuáles son los alimentos que no pueden faltar en el organismo de la mamá y del bebé en formación?
En este sentido, se recomienda que la alimentación de una embarazada sea una dieta saludable que cubra todas las necesidades nutricionales. Para ello, los alimentos que no pueden faltar son los siguientes:
Cereales. Arroz, avena, cebada, maíz, trigo, y sus derivados como harinas, féculas y productos elaborados con las mismas (fideos, panes, galletas, etc). Este grupo también incluye las legumbres: arvejas secas, lentejas, etc. Se caracteriza por aportar energía, vitaminas del grupo B y fibra. Las harinas de trigo enriquecidas proporcionan un muy alto porcentaje del requerimiento de ácido fólico y hierro. De este modo, según la especialista, “se recomienda que estos deben representar un 60 % de la dieta y en lo posible es conveniente escoger productos integrales”.
Verduras y frutas. Se encuentran todas las variedades de las mismas y sus jugos naturales. “Siempre es mejor que se prioricen las de estación y se aconseja evitar los enlatados y congelados. Es recomendable consumir diariamente tres raciones de frutas y dos porciones de hortalizas, una cruda y otra cocida. Es menester la ingesta de hortalizas de hoja verde oscura, ya que contienen en mayor cantidad calcio, hierro y zinc”, expresó la entrevistada.
Leche, yogurt y quesos. Se aconseja, según Mora, ingerir entre dos a tres porciones diarias tratando de elegir las bajas en calorías. El calcio sirve para el desarrollo de los dientes y huesos en la formación del bebé al igual que para mantener la actividad ósea de la madre. Éstos son ricos, también, en fósforo y proteínas.
Carnes y huevos. Se consideran todas las carnes de animales de crianza y de caza (vacuno, pollo, porcino y caprino); como así también sus órganos (hígado, riñón, etc). Se incluyen todos los huevos comestibles. “Estos alimentos son fuente de proteínas, hierro y zinc. Se aconseja consumir de dos a tres porciones diarias”, aseveró la entrevistada.
Aceites, frutos secos y semillas. “Éstos suman energía; y en particular los aceites vegetales y las semillas proporcionan vitaminas y ácidos grasos esenciales”, dijo la especialista.
Azúcares y dulces. Éstos dan energía y no es fuente de nutrientes esenciales que no puedan ser obtenidos con otros alimentos saludables. “Debería mantenerse la ingesta al mínimo, pero un antojo es permitido y no hace daño a la embarazada ni al bebé”, afirmó dicha fuente consultada.
Además, la hidratación es imprescindible para la salud, por eso la entrevistada recomienda tomar ocho vasos diarios de agua potable.
Amamantar: un saludable acto de amor
Los beneficios de lactancia son múltiples y quienes son madres describen este acto como el vínculo más fuerte que pueden establecer con sus bebés después de nacer, es el momento donde mamá e hijo se conectan desde el amor y el pensamiento.
“La leche materna es el mejor alimento y el más completo que puede recibir un hijo recién nacido. Le brinda todos los elementos que necesita para un crecimiento y desarrollo saludables”, se indicó desde el ministerio de Salud de la Nación. Es así que dicha cartera recomienda dar leche materna hasta los seis meses y aconseja evitar cualquier otro alimento o líquido como agua, té o jugos. Se sugiere continuar dando la teta hasta los dos años.
El calostro (primera leche de la mamá) es el mejor alimento que puede recibir un recién nacido ya que lo defiende de las infecciones más comunes. La leche materna está siempre adaptada a las necesidades del hijo/a por eso es que se digiere mejor que cualquier otra leche.
“La leche de la madre cubre todas las necesidades de energía y nutrientes para el óptimo crecimiento y desarrollo del bebé. Para que esto suceda la lactancia debe ser exclusiva y a demanda”, subrayó Mora.
Para mayor información sobre consejos nutricionales se puede escuchar la difusión de los mismos en el segmento “Menú Varelense”, perteneciente a la secretaría de Salud local, que se emite los miércoles a las 11:30 horas por el dial de la radio del Estado Municipal FM 87.9 y a través de su página web: http://www.radiomunicipalfv.gob.ar
Por último, es menester recordar que el material de este artículo periodístico, entregado en forma de columna semanal, está destinado a proveer recomendaciones nutricionales de educación alimentaria a la población varelense, es así que no constituye la opinión ni la consulta médica. Por eso, ante cualquier duda, debe consultarse al médico.
Dato: la vitamina C es fundamental durante el embarazo. Se recomienda 85 miligramos por día que equivale al consumo diario de: dos naranjas de tamaño normal (que son fuente de ácido fólico), o una naranja grande, o diez frutillas, o 200 gramos de brócoli.
*Fuente consultada: Ministerio de Salud de la Nación.