Elradardelsur.tv – 07/08/2020
Julio tiene 43 años, vive con su esposa Mirta con quien tiene 4 hijos en el barrio Santa Rosa. En una entrevista exclusiva, nos contó cómo fue su lucha contra el Covid-19 y el mes de internación que tuvo frente a la enfermedad en el Hospital Modular de Florencio Varela.
Mirta, esposa de Julio, detalló cómo fueron los hechos que derivaron en la internación de su marido, “Todavía estamos emocionados, fue desesperante. Después de tener síntomas de gripe, le hicieron el hisopado y nos dijeron que los resultados estaban en 3 días, pero los resultados no llegaban y él se sentía cada vez peor, por eso fuimos al hospital “Mi Pueblo”, ahí quedo sin oxígeno y lo llevaron al modular, donde lo intubaron. Me llamaron y me dijeron que estaba muy complicado, pero que todavía no estaba el resultado del COVID. Esto empezó los primeros días del mes pasado”.
La familia de Julio, como todos los parientes de pacientes internados por esta enfermedad, no pudo acompañarlo, “Viste que uno no puede estar, es desesperante solamente tenes que esperar el llamado. A los 9 días de estar internado me hicieron firmar por si tenían que intervenir para salvarle la vida”, ahí ya sabían que era Covid positivo y agregó “Después al otro día me empezó a llamar la Dra. Ángeles, por eso es que yo estoy muy agradecida con ella, porque me dio su esperanza y su fe día a día, me decía que rece, que él era joven y así seguimos rezando todos, amigos, familia, porque otra cosa no se podía hacer” contó Mirta.
Luego de estar varias semanas internado en terapia, el día 25 lo pasaron a sala y le sacaron el tubo y su familia pudo volver a comunicarse con él quien les contaba que estaba súper contento con la gente que trabaja ahí.
Por su parte, Julio expresó que “Estoy agradecido con todos, con la Dra. Karina, con la gente de limpieza, la seguridad, con los enfermeros que son espectaculares, todos siempre me tiraron buena onda y me daban fuerza, me decían que me recupere, todo el equipo que pusieron ahí es excelente, estoy súper agradecido”.
Julio es hincha de Racing y nos contó “Siempre me cargaban y me decían pórtate bien hincha de Racing, porque yo tengo el tatuaje en la espalda. Me decían que era el mimado de ahí”. Ahora, ya dado de alta, debe seguir tratando otras afecciones que le trajo la enfermedad y de a poco ir recuperando nuevamente su vida.
