Elradardelsur.tv-04/05/2020
Internos de la Unidad 23 de Florencio Varela nos enviaron un video donde realizan diferentes reclamos por las condiciones en las que están detenidos, sumando a esto, el peligro de la pandemia de coronavirus.
EL RADAR DEL SUR entrevistó a Gabriel Ortiz (36), quien es el recluso que lleva la voz cantante en la filmación.
Él está condenado a cinco años por robo siendo un preso reincidente.
Ortiz expresó: “Lo que estamos pidiendo los reclusos de la Unidad 23 al igual que otros penales, es que los internos que estén en riesgo de contagio de coronavirus sean atendidos. Hay presos con asma, HIV y otras enfermedades.
Que los jueces realicen los correspondientes informes para aquellos reclusos que estén cerca de cumplir la condena puedan recuperar su libertad.
En un principio, nos habían dicho que iban a traer personal médico y equipos para que los atendieran. Cuando se dio a conocer el caso del interno con coronavirus, solo enviaron a ocho médicos que estuvieron cuatro o cinco días y se fueron. No hay una atención adecuada”.
Sobre las condiciones de las cárceles expresó “Hace 15 años atrás, la situación era peor. En el módulo que estamos ahora tiene una capacidad para 60 camas donde dormimos 95 presos, algunos lo hacen en el suelo”.
Ortiz se encuentra cumpliendo una condena de cinco años por robo, recién va por el segundo. No es la primera vez que está preso.
“La primera vez que robé tenía 19 años, cumplí varias condenas. Seguramente podría haber elegido otra opción de vida. Lamentablemente hay momentos en que la situación que uno vive o a veces la misma sociedad te lleva hacer este tipo de cosas.
Sé lo que hice, seguramente he marcado la vida de alguien por el hecho que cometí.
De todas maneras, no quiere decir que ahora vayamos a quedar en libertad para volver a delinquir, solo pedimos que los presos enfermos o los que están dentro de los parámetros para salir se les dé una respuesta.
Somos conscientes que tenemos que pagar por los delitos que cometimos, pero en las cárceles también tenemos derecho a la salud.
No hay tiempo, ni tampoco lugares como para apartar a los pacientes de riesgo a otro espacio.
Si no hay atención tiene que haber alguna solución.
No estamos pidiendo que abran los candados para una libertad masiva de presos. Cada cual sabe el delito que cometió”.
La experiencia de Gabriel Ortiz deja un claro mensaje para la sociedad, nada garantiza que recuperen su libertad y no vuelvan a delinquir.
Reiteramos, los que pagamos impuestos, trabajamos y cumplimos las normas no solo vamos a tener que cuidarnos del coronavirus sino también de los delincuentes.
Nosotros también tenemos derecho a la salud y a vivir tranquilos.