Elradardelsur.tv-02/03/2020
Este lunes, una interminable marea de docentes se concentra en la emblemática Plaza Independencia de Tucumán, justo enfrente de Casa de Gobierno de esa provincia para pedirle a Juan Luis Manzur, gobernador de la provincia “que se vaya”.
Los impulsa el enojo y la decepción, porque les han impuesto una conciliación obligatoria inesperada, en medio de las negociaciones paritarias locales.
Por eso, decidieron no dar clases este lunes y manifestarse a efectos de hacer escuchar al gobierno sus reclamos.
Todos reclaman al gobierno “que se vayan”, como en aquellos acalorados días de 2001.
Respecto de la cuestión paritaria, todo arrancó este viernes luego de que los docentes dependientes del Estado provincial, nucleados en la Agremiación Tucumana de Educadores Provinciales (ATEP), rechazaran una nueva propuesta del Gobierno, lo cual provocó que, desde el Poder Ejecutivo, decidieran dictar la conciliación obligatoria.
“Vamos a usar una herramienta legal que tiene el Estado, que es decretar la conciliación obligatoria para poder seguir conversando y decirles que el lunes empiezan las clases", señaló al respecto el gobernador.
Los gremios docentes tucumanos han sido cooptados por el gobierno, lo cual pone en situación de mayor vulnerabilidad a los educadores de esa provincia.
Como sea, lo que ocurre en estas horas es histórico. Nadie comanda a ese flujo de ciudadanos que se muestran enardecidos. Es totalmente espontáneo.
Ahora mismo, otros mandatarios deberían tomar nota de lo que sucede Tucumán. Porque este tipo de movidas, tal cual ha demostrado la historia argentina, siempre son contagiosas.
Fuente: Tribuna de Periodistas