Elradardelsur.tv : 2/8/2014 : Fotos Hope for Gammy
Un  matrimonio australiano que alquiló un vientre a una mujer en Tailandia abandonó a uno de los bebés que nació producto de la gestación porque tiene síndrome de Down y una grave afección en el corazón.Â
La pareja volvió a su país con la hermana gemela, que es sana.
Así lo relató la joven madre tailandesa, Pattaramon Chanbua, en declaraciones a la radio australiana ABC, y la historia desató una oleada de indignación.Â
Hasta el primer ministro australiano, Tony Abbott, se involucró en el caso y prometió ayuda.
Pattaramon Chanbua tiene 21 años y trabaja a unos 90 kilómetros de Bangkok, en una cocina precaria instalada junto a una calle, y alimenta con ese dinero a su familia. Es madre de dos niños de seis y tres años, según ella misma relató, y tiene muchas deudas.
Por eso, cuando un hombre de una agencia de alquileres de vientre le ofreció 10 mil euros por dar a luz a un bebé, ella dijo que sí.
En Tailandia, el alquiler de vientre no es ilegal, pero tiene sus condiciones: la subrogante debe ser familiar de los futuros padres y además, no debe recibir dinero por el acto.
"Para mí es mucho dinero y pensé que con ello podía pagar primero la educación de nuestros hijos y después las deudas", dijo la mujer.
Pero cuando durante el embarazo se supo que iba a tener mellizos y que uno de ellos tenía síndrome Down, la pareja australiana le pidió que abortara, pero ella se negó, porque el aborto no está aceptado por su religión, el budismo.
Los mellizos nacieron en diciembre y la pareja se quedó sólo con la niña sana. "A mí me dio pena el niño", dijo entre lágrimas Pattaramon. "No es su culpa. Yo lo quiero como si fuera uno de mis hijos, después de todo paso nueve meses en mi panza".Â
Ahora, Gammy, el bebé, debió ser ingresado en el hospital debido a una grave infección pulmonar que podría costarle la vida, según informa el diario Bangkok Post. Además, según, Chanbua, necesita una operación de corazón.
Como la joven mamá no está en condiciones de afrontar los gastos médicos, en Australia se habilitó una cuenta para recaudar dinero y en poco tiempo se consiguió reunir más de 134.000 dólares.
"Es una historia increíblemente triste", dijo el Primer Ministro australiano. "Creo que es uno de los peligros de este particular negocio (por el alquiler de vientre)", agregó. El ministerio de Asuntos Exteriores investiga el caso, según dijo a la prensa una vocera.
Fuente (TN)