ElRadardelsur.tv - 31/1/2014- Fue Primicia – Único medio
Dos de cada siete denuncias que se reciben por maltrato familiar a adultos corresponden a hombres golpeados, estas cifras son extraoficiales.
Hace más de dos años que Víctor Arrieta (52) viene tratando de encontrar una solución al continuo calvario que vive él y su hijo de 11 años.
Santiago nos recibe en su casa de Florencio Varela, al sur del gran Buenos Aires.
Es un hombre corpulento, de rasgos oscos y mirada triste.
Nos comenta que fue víctima de la ira de su ex mujer, cuando intercedió para que ella dejara de pegarle a su hijo con un cinturón.
Nos muestra su cuerpo, lleno de moretones y marcas que le quedaron grabadas en la piel, que demuestran el nivel de agresión de los cintazos recibidos.
El último episodio de violencia ocurrió días pasados, cuando Angélica P. A. (52) de profesión médica pediatra, su ex mujer, comenzó a agredir al hijo de ambos y él se interpuso para evitar que lo siguiera azotando.
Victor nos muestra denuncias realizadas por otros hechos de violencia, y amenazadas de muerte hacia él y su hijo por parte de Angélica.
Nos entrega la copia de un informe psicológico realizado a su hijo, en el cual se informa que el pequeño tiene ideas suicidas debido a las situaciones que le toca vivir.
Víctor contiene las ganas de llorar y nos relata “Mi ex mujer con la cual tengo un hijo, de 11 años, es muy agresiva con mi nene, estamos separados hace mucho tiempo, a mi hijo lo crie desde los seis meses, hasta que tenía ocho años. Una vez que él se podía arreglar más o menos solo, recién ahí fue a vivir con la madre.
Ella es médica pediatra, vive a dos cuadras de acá, en la esquina donde tiene el consultorio.
No es la primera vez que amenaza de muerte a mi hijo y a mí.
Tengo radicadas denuncias desde hace dos años.
Angélica además ocasionó el año pasado un grave problema en la escuela donde concurre mi hijo, se puso muy agresiva con las docentes del establecimiento.
El nene fue sometido a un informe psicológico donde dice que él tiene dificultades en el vínculo con su madre, que es víctima de violencia por parte de la misma, y que tiene mucho miedo cuando su mama se enoja.
Y lo que es peor, dice que tiene ideas suicidas” Los ojos de Víctor se llenan de lagrimas pero continua el relato.
“El domingo el nene tenía que estar conmigo, me pidió permiso para ir con su mama a la casa de la abuela, allí están los primos, quería jugar y a su vez llevar un perrito que hacía pocos días tenia, pero la mamá no quería que lo llevara.
Lo acompañe a que le pidiera permiso por el cachorro.
El nene entró, se sentó en el auto con el perrito a upa, Angélica se puso como loca, empezó a gritar, a insultarlo con palabras irreproducibles, le decía que se fuera, que lo iba a matar a él, al perro, y a mi.
Yo estaba del otro lado de la reja, entró agarró un cinturón, le empezó a pegar, mi hijo gritaba, entré, me puse en el medio, no paraba de pegar.
Ingresaron los vecinos, una señora se llevo a mi hijo, y otras trataron de tranquilizarla.
Hice una nueva denuncia, el médico de policía confirmo los golpes que tiene mi hijo y los míos, esto no puede seguir así, la justicia debe hacer algo, mi hijo está con ella, tengo miedo, no sé cómo puede terminar. Ahora se lo llevo a la costa, estoy preocupado, nadie me escucha, nadie me ayuda, quien debe brindar una solución no lo hace. Esta mujer necesita tratamiento, ayuda, porque así es un peligro”
Vecinos del barrio a quien consultamos narraron la situación vivida tal cual la contó Víctor, él es un hombre golpeado, con un montón de moretones en su cuerpo, tratando de luchar contra un sistema que no lo escucha.
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